En un solo día, Richard Halsey Best cambió el rumbo de la guerra en el Pacífico. Con un ataque certero, destruyó el portaaviones Akagi y ayudó a hundir otros dos colosos japoneses.
Piloto del USS Enterprise, su valentía lo convirtió en una leyenda. Ahora, su historia cobra vida en un cómic que rinde homenaje a su hazaña.
Aunque su nombre no es tan conocido como el de otros aviadores que participaron en el Día D, Best fue fundamental en otro frente clave: la guerra en el océano Pacífico.
Nacido en 1910 en Estados Unidos, se formó como piloto e instructor antes de unirse a una unidad de bombarderos en picado. En mayo de 1940, se convirtió en teniente de aviación a bordo del portaaviones USS Enterprise, cuando su país aún no había entrado en la guerra. Todo cambió con el ataque japonés a Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941.